27. Otros indicadores de la situación actual tienen que ver con el agotamiento de los recursos naturales. Conocemos bien la imposibilidad de sostener el actual nivel de consumo de los países más desarrollados y de los sectores más ricos de las sociedades, donde el hábito de gastar y tirar alcanza niveles inauditos. Ya se han rebasado ciertos límites máximos de explotación del planeta, sin que hayamos resuelto el problema de la pobreza.

Del desarrollo de usar y tirar ya hemos hablado en otra entrada, por lo que no vamos a repetirnos nuevamente. Y de la imposibilidad de sostener nuestro ritmo de vida.

Pero este pequeño párrafo hace, casi de pasada, una observación que debería aterrorizarnos: mucho desarrollo, mucho avance tecnológico, muchos descubrimientos, mucho usar y tirar, pero la pobreza sigue ahí. ¿Y no debería ser el principal problema a afrontar?

Así, al menos, lo expresa la propia ONU con sus objetivos de desarrollo sostenible. Pero no parece que se organice en torno a ello, ni que sea el principal objetivo de los planes de desarrollo de los diferentes países. Seguimos avanzando y comiéndonos el planeta, y temiendo porque nuestro desarrollo pueda ser puesto en peligro por vivir justamente.

¿Es eso propio de cristianos? ¿Es eso propio de hombres comprometidos?

Miguel Ángel