(Entrada publicada en el blog Entreparéntesis)
Para llenar un pesebre de vida
y alegría desbordada,
sólo Dios basta…
Para alegrar la cara de dos padres primerizos,
cansados de buscar posada,
sólo Dios basta…
Para dar protagonismo a un burro y un buey,
inquilinos de tan humilde morada,
sólo Dios basta…
Para separar de su ganado a los pastores
que vigilan en la noche estrellada,
sólo Dios basta…
Pero si a Dios sólo le basta
con un humilde pesebre,
dos padres, primerizos, que le dediquen su mirada,
el calor de dos pobres criaturas
y unos amigos que compartan su velada…
¿a dónde vamos nosotros
con nuestra vida tan sobrecargada?
Un fuerte abrazo navideño de vuestros hermanos de Cristianismo y Ecología.
Cristianismo y ecología 
Buenos días amigos
Soy Nené, de Biotropía
Quiero agradeceros la campaña de Adviento que diariamente me ha servido para tener unos minutos para plantearme la Encíclica con prácticas sencillas y cotidianas. La he compartido con gente conocida y me han comentado que les ha ayudado y me han dado las gracias por enviárselas, os las transmito.
Un fuerte abrazo con mis deseos de que en este nuevo año sigamos agradecidos y atentos a la VIDA.
Nené
El 1 de enero de 2017, 21:46, Cristianismo y ecología escribió:
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