Primera semana de Adviento: ¿A qué nos estamos preparando?
Sábado 14. Sábado práctico: La decoración de la casa
Is 30, 19-21. 23-26
Sal 146
Mt 9,35-10, 1.6-8
Abeto fiel, abeto fiel,
qué verdes son tus ramas.
Tú nos traerás felicidad
al festejar la Navidad.
¿Alguien se ha preguntado el sentido que tiene llenar un árbol de luces de colores?
En el fondo, la pregunta importante es:
¿Qué queremos que nos recuerde la decoración navideña de nuestra casa?
¿Nos está ayudando a vivir las claves cristianas de la Navidad?
¿Cuáles son los sentimientos que queremos que nos suscite?
¿Y qué estamos transmitiendo con esta decoración navideña
a quienes vienen a nuestra casa?
Y a continuación: ¿es ésta la decoración más adecuada para todo esto?
Este año tenemos la oportunidad de decorarla de otra manera,
de modo que a nosotros nos lo recuerde
y a quien entre en nuestra casa en estos días le haga darse cuenta:
“es verdad: aquí se vive la Navidad de otra manera…”.
¡Claro que hay que decorar la casa y engalanarla de fiesta!
Pero de tal manera que nuestra decoración nos recuerde siempre
el motivo de nuestra alegría.
¿Por quién se ha encarnado Jesús?
Por ti, por mí, por todos los de la casa.
Por todos los seres humanos, y especialmente por aquellos más necesitados.
Pues decoremos la casa con fotos de todos ellos:
los hambrientos, los refugiados, los mendigos…
¿Mal gusto? Al contrario: es el gusto originario de la Navidad…
Ellos, como los pastores de Belén, siguen siendo
los primeros destinatarios de la Buena Noticia.
Señor Jesús, tú que te encarnas por todos nosotros,
ayúdanos a ser lúcidos y conscientes en la decoración de nuestras casas
para que nos recuerden el sentido cristiano de la Navidad.
Gracias .Me ha gustado mucho la sugerencia sobre la forma de adornar la casa en la Navidad. Teresa