
21. Hay reglas económicas que resultaron eficaces para el crecimiento, pero no así para el desarrollo humano integral [16]. Aumentó la riqueza, pero con inequidad, y así lo que ocurre es que «nacen nuevas pobrezas» [17]. Cuando dicen que el mundo moderno redujo la pobreza, lo hacen midiéndola con criterios de otras épocas no comparables con la realidad actual. Porque en otros tiempos, por ejemplo, no tener acceso a la energía eléctrica no era considerado un signo de pobreza ni generaba angustia. La pobreza siempre se analiza y se entiende en el contexto de las posibilidades reales de un momento histórico concreto.
[16] Cf. S. Pablo VI, Carta enc. Populorum progressio (26 marzo 1967), 14: AAS 59 (1967), 264.
[17] Benedicto XVI, Carta enc. Caritas in veritate (29 junio 2009), 22: AAS 101 (2009), 657.
Pobreza absoluta, pobreza relativa... Si el umbral de pobreza es móvil, si asumimos la pobreza como relativa, ¿no asumiremos también la naturalidad del paradigma de crecimiento? ¿No están nuestras "posibilidades reales" por encima de la sostenibilidad planetaria? Quizás es que debamos abrirnos a que los pobres, realmente, nos evangelicen... Quienes viven con lo necesario, cuestionando nuestra opulencia; y quienes no llegan, pudiendo acoger nuestro exceso. A tener una huella sostenible los pobres nos evangelizan.